SUEÑOS

TRANQUILAMENTE PODRÍA SER EL FABRICADOR DE SUEÑOS.

Hoy es un día triste, a pesar de estar soleado y resplandeciente, me desperté de un sueño, un sueño que es como la realidad de la vida misma, un sueño que se encontraba dormido, aletargado dentro de mí, pero que como una ráfaga de viento paso a mi lado, despertándole de mi interior.

Una de las muchas formas que podemos encontrarnos a los sueños.

Los sueños están ahí delante, de nosotros, a nuestro lado, siguiéndonos esperando a ser reconocidos, perseguidos y cogidos, como cual niños que somos.

 

Los Sueños nos persiguen sin darnos cuenta.



Lo triste es que un día dejamos de soñar, buscamos el sueño terrenal, intentamos materializarle, tocarle, perdiendo ese encanto,

Hubiéramos preferido seguir soñando, a pesar de alzar la mano para poder cogerle y estrecharle entre nuestro cuerpo para luego arrepentirnos por si se pudiera romper en nuestras manos.

Mejor renunciar a ese contacto, pues el daño que nos produciría esa pérdida sería muy doloroso. 



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Solo muere un amor que dejo de soñarse, NO PUEDO, NI QUIERO DEJAR DE SOÑAR CONTIGO

                                                               TÚ ERES MI SUEÑO.